Su nombre es Jin Xing,
y es una de las personalidades más conocidas en China. Ha formado parte del
ejército, ha sido bailarina, actriz, presentadora de televisión y un ícono
cultural asiático. Antes de todas estas facetas, Xing era hombre. Nació en
China en 1967, y desde entonces ha experimentado importantes cambios a nivel
físico y cultural. En esta oportunidad te contaremos todo lo que debes saber
sobre esta famosa bailarina china.
La primera transexual
reconocida por el Gobierno de China
Jin Xing ingresó a la academia de baile del
Ejército de China a los nueve años, una institución al servicio de la
propaganda de las fuerzas armadas de ese país en la época de la revolución
cultural. Allí aprendió el manejo de armamento, ópera china y ballet ruso. La bailarina china afirma que a los seis
años comenzaron las dudas y las molestias con respecto a su sexualidad,
deseando siempre convertirse en una niña.
Al llegar a la etapa de la adolescencia logró descubrir su
sexualidad, sin embargo, prefirió ignorar la situación porque tenía dudas sobre
cómo catalogarse y por las complicaciones propias de que se supiera la noticia
en su país. Jin Xing entendió que
para estar cómoda primero necesitaba ser famosa. En tal sentido, se esforzó incansablemente
por ser el mejor bailarín. A los 18 años ganó el campeonato nacional, siendo el
primer hombre que bailaba de puntas en China (además de pertenecer al ejército.
Dos años después de ser ascendido a coronel, logró obtener
una beca para estudiar danza en Nueva York. Luego de ocho años y de descubrir
su sexualidad, decidió retornar a China para operarse. Su deseo siempre fue que
las personas la quisieran por lo que en realidad era. Con el apoyo de su padre,
de origen coreano, logró modificar su documento de identidad. Luego de una
lucha incansable, Jin Xing logró
convertirse en la primera transexual china en lograr el reconocimiento del
Gobierno en el año 1995.
La bailarina china actualmente está casada con un
empresario alemán y tiene tres hijos producto de la adopción. En el año 1999
decidió fundar su propia academia de baile, con la que consolidó su amplio
reconocimiento como coreógrafa, con apariciones en televisión, cine, programas
de talentos, etc. A pesar de su enorme cambio, se le ha criticado por no
defender los derechos de la comunidad transexual, sin embargo, su historia se
resume en la reivindicación de sus derechos y la libertad individual.